Como dice la sevillana… Dichosa la rama que al tronco sale.
Como marca la tradición, cada mes de agosto la aldea del Rocío se llena de devotos para engrandecer este lugar y agradecer la protección de la Patrona del Almonte a su pueblo hace ahora 212 años.
Es por ello que, el último día de triduo de la celebración de este Rocío Chico, la Hermandad Matriz de Almonte ha llevado a cabo la imposición de la medalla a sus nuevos hermanos.
200 nuevos rocieros que se suman a esta Hermandad aceptando el compromiso de la misma y para muchos cumpliendo un auténtico sueño.
Con estas nuevas incorporaciones, la Hermandad suma en su cuota de hermanos más de 13.500 personas.
Una tradición que marca la fe rociera desde los más pequeños hasta los mayores que han decidido formar parte en este Rocío Chico de la familia rociera de la Matriz.