Fue 22 de octubre y en Bonares amanecía de una manera muy especial.
Como marca la tradición cada día 22 del mes de octubre, los vecinos de Bonares salen a la calle para volver a reencontrarse con su patrona, Santa María Salomé.
Un día lleno de emoción y sentimiento que este año ha podido disfrutarse con el sol en el cielo tras las inclemencias meteorológicas del pasado año que impidieron vivir este día con normalidad.
La mañana comenzaba ante Ella en la función principal y continuaba con la procesión de la Santa resguardada de vecinas iluminando su caminar y guiada por los pasos de los quintos, esta vez la de 2024. Niños de 18 años que cumplían el sueño que venían esperando desde pequeños y acompañados por quintos de años anteriores.
La Banda de Música del municipio fue la encargada de poner los sones musicales a la procesión, al igual que lo hará el próximo 1 de noviembre cuando la Santa vuelva a su Ermita.
Un nuevo 22 de octubre que quedará guardado para siempre en la historia de esta Hermandad y en el recuerdo de todos los que fueron testigo de su mirada este día tan especial.