La Virgen de las Mercedes, patrona de Bollullos, ya descansa en su ermita después de un mes intenso de cultos y fiestas en su honor. Este año, el traslado de vuelta ha contado con una novedad en cuanto a su organización.
Lágrimas en los rostros, sobre todo, de aquellas personas mayores que han acudido a despedir a la imagen, que se encontraba vestida con su tradicional esclavina, en un traslado que deja momentos especiales como el encuentro con el monumento a San Antonio.
Tras los principales cultos en su honor, la Virgen de las Mercedes espera la llegada de sus hijos bollulleros, que volverán a traerla, como es tradicional, para la Solemnidad de la Inmaculada Concepción.