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Se quedaron los primeros tres puntos de la temporada en el bando palmerino y tuvo que ser en un derbi súper intenso y en el que nadie regaló nada sobre la pista. Los palmerinos enfundaron su victoria en una gran segunda parte en la que pusieron el cerco y supieron jugar con el ansia y la desesperación rival.
El partido inició con los dos equipos lanzados al ataque con una fuerte presión. La primera de la tarde la tendría Juanmita que se encontraría con Loren nada más arrancar. Pero un minuto después, un balón que Juanma se cocina en el área se saca un zurdazo a la escuadra que suponía el 1-0 en el marcador.
Con el primer tanto, el Villalba buscaría con más mordiente en sus rotaciones el empate. A partir de aquí, Candi y Juanma llevarían el peso del ataque en las que les tocaría probar al meta Gonzalo con sus disparos. Le daría sus frutos la presión a los de Jorge Guerra cuando una rápida transición es Juanma quien saca un disparo raso para colocar el 1-1.
Hasta entonces, los primeros minutos discurrían con una absoluta igualdad y unos minutos trepidantes con ocasiones para cada bando. Pero el partido se rompía en el min 9, cuando el local J.J. Chans es expulsado por una disputa con Iván Pinto. Esta situación que favorece enormemente al Villalba durante dos minutos, la desaprovecha con un carrusel de ocasiones. Entre Iván y Candi tienen las mejores ocasiones pero la defensa palmerina se multiplicó y evitó el tanto rival.
Mientras tanto, los colegiados sevillanos – que no tenían una buena tarde con algunas decisiones que desquiciaban a ambos equipos y calentaba aún más si cabe el derbi – cargaban de faltas a los dos equipos y en el minuto 13 decretaban un penalti que fuerza el local Juanma cuando se marchaba directo a portería. Sería Juanmita desde el punto de penalti quien colocaba ante Baranda el 2-1 con un disparo inapelable.
El gol vuelve a poner por delante a los de Jesús Martínez, pero el tramo final de la primera parte sigue en consonancia al buen juego que despliega Villalba y que hace retroceder líneas a los palmerinos. En el 16´, para más inri cometían la quinta falta que beneficiaba al cuadro visitante. De esta manera, una jugada que nuevamente lanzan rápido los de Jorge Guerra es Iván quien asiste a Antonio del Valle y la coloca ante Gonzalo para devolver el empate. Antes del descanso, Candi desaprovecha un disparo de 10 metros y el partido finalizaba con 2-2 en el electrónico.
La vuelta por vestuarios, el partido perdió en intensidad fruto del gran despliegue físico que habían realizado. Mucho más enchufado arranca el cuadro local que vuelve a ser mordiente en su presión. En una de ellas, una buena jugada colectiva le llega a Juanmita quien deja a placer a Cuerda para que volviera en el 23´ a colocar el 3-2 y poner por delante al equipo local.
Este gol hace daño al equipo villalbero que le cuesta coger el ritmo del partido con un Smurfit que le toca bregar en defensa y evitar los misiles de Iván y Juanma. Dominio sin fortuna de cara a puerta del Villalba FS que no consigue el empate en la meta de Carlos Medrano.
Más castigo recibirían los visitantes, en el minuto 30, cuando una salida de presión de libro, coge la espalda a la defensa y aprovecha la mala salida de Baranda para poner el 4-2 en el marcador y levantar con furor a la grada local – completamente hoy llena -. Mientras tanto, seguía el otro partido en el bando arbitral que tras ponerse duro en la primera mitad, ahora permitían varias “plantillas” de tarjeta naranja.
Tras el gol, el partido cambia totalmente su decoración y se vuelve totalmente loco en las que no existen las defensas. Juanmita tuvo el quinto en varias contras y nuevamente Sofiane e Iván se encontraron con Carlos en varios paradones de mérito. No le interesaba este tipo de partido a los visitantes y apostaban por el juego de cinco donde Jesús Ruiz haría las funciones de portero-jugador.
La primera jugada que realizan casi acaba en gol de no ser por Carlos, que se crecía en portería. Un buen movimiento que acaba con un pase al segundo palo para Juanma que volvía a marrar. Aguantó el tipo el Smurfit Kappa que haría la sentencia con el 5-2 con el protagonista de la segunda mitad, Carlos Medrano, que conseguía desde su portería aprovechar el desorden en el cambio y matar el partido con su gol en el minuto 37.
Poco más hubo que destacar en el tramo final con un Villalba que lo volvía a intentar pero Carlos se lo negaba en portería. El despliegue defensivo palmerino duró hasta el final y tuvo el premio de llevarse el derbi y sumar unos valiosos tres puntos más en liga.
