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La Virgen del Rosario de Hinojos ha procesionado este fin de semana por las calles de su pueblo. Una procesión que supone el culmen de su programa de actos y que los devotos de la Virgen han disfrutado doblemente después de que la lluvia impidiera la jornada anterior el rosario vespertino.
«Por las inclemencias no pudimos salir a la calle, así que ahora con muchas ganas y después de haberle impuesto la corona a la Virgen todavía más», ha resaltado Carmen Rodríguez, Hermana Mayor de la Hermandad.
Una corona que se ha impuesto en una coronación popular siguiendo las instrucciones del párroco.
«Hace unos 11 años le fueron sustraídas dos doronas a la Virgen. En su momento se le hizo una y ahora, al cabo de once años, un grupo de hermanos quiso que volviera a tener el patrimonio que realmente le corresponde», ha relatado emocionada Rodríguez.
El ayuntamiento de Hinojos también ha querido estar presente en esta emotiva procesión de la Virgen por las calles del municipio, resaltando la importancia cultural que las hermandades tienen en el pueblo.
Para la ocasión, la Virgen del Rosario ha lucido una vestimenta muy clásica, al estilo de las glorias sevillanas.
«Porta su saya de tisú de plata bordada en oro antigua, su manto rojo bordao que es el clásico del día de hoy, y en cuanto a tocado lleva un tocado de bruselas antiguo puesto a modo de blonda, enriquecido con encajes de hojilla», ha explicado el vestidor de la Virgen del Rosario, Jesús Castizo.
Sencilla y majestuosa, así ha procesionado la Virgen del Rosario en una jornada que ya está grabada para siempre en la memoria y en el corazón de los hinojeros.
