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Los duelos entre Carolina Marin y Nozomi Okuhara van camino de convertirse en uno de los más disputados e importantes del bádminton mundial, todo un clásico. Con la victoria en Dinamarca la pasada semana, Okuhara rompió una racha de cuatro victorias de la onubense en sus duelos particulares y apeó a Marín de la final de Odense.
Una derrota que ha podido devolver Carolina Marín en el Abierto 750 de Francia ya que la onubense, numero 17 del mundo, se media en octavos de final a la subcampeona del mundo y tercera del ranking. Marin ha superado a la nipona por 21-17 y 21-18 en un duelo muy disputado y en el que Marin, en un partido muy táctico en el que Carolina se mostró sólida en su juego y con gran confianza en sus posibilidades, ha podido tomarse la revancha de la derrota en el Open de Dinamarca.
Así, la onubense se medirá en cuartos de final a la tailandesa Ratchanko Intanon, número cinco mundial, que superó con comodidad a la rusa Eugenia Kosetskaya por 21-16 y 21-12.
