UGT y CCOO también pudieron llevarse su ‘tajada’ de los ERE fraudulentos de la Junta de Andalucía. Así lo apunta hoy El País, que recuerda que, aunque ya era sabido que como parte necesaria para presentar un expediente a la Administración autonómica, estos sindicatos cobraban su comisión, ahora se ha sabido que han podido embolsarse 4,2 millones de euros en ‘sobrecomisiones’ ilegales, según la jueza Mercedes Alaya, procedentes solo de la consultora Vitalia, que gestionó los expedientes fraudulentos junto a la firma Uniter.
La información, recibida con notable indignación por parte de diversos sectores de la sociedad andaluza, ha sido negada por ambos sindicatos.
Las centrales sindicales, en concreto, cobraban entre el 0,5 y el 1% de cada ERE mediante sus agencias de corretaje de seguros Atlantis Asesores y Temiqui, según El País.
En dicha información se apunta la existencia de ‘dos personajes clave en esta connivencia a seis bandas entre la Junta, las consultoras, las aseguradoras, los bufetes, los empresarios y los sindicatos son el intermediario Juan Lanzas y el ex director comercial de Vitalia Antonio Albarracín’.
Tal y como ya adelantó Canalcosta TV, la jueza ha enviado a ambos a prisión como piezas fundamentales de la trama de la Operación Heracles, después de que el ex director general de Trabajo Javier Guerrero regresara a la cárcel el día antes. Albarracín declaró durante siete intensas horas y Lanzas mantuvo silencio, con igual resultado.
Lanzas, ex sindicalista de UGT “reconvertido en un ‘conseguidor’ millonario gracias a su habilidad para engatusar a empresarios y comités de empresa de las bondades de un ERE subvencionado por la Junta, cobró sus servicios de múltiples formas. Su exjefe Albarracín le incluyó junto a su mujer, también detenida, como intruso (prejubilado ajeno a la empresa) en el ERE de la firma Hitemasa para cobrar 455.014 euros de los fondos públicos’, según El País. ‘La Junta consentiría este hecho en claro perjuicio del erario público, como también consentiría en esta póliza la inclusión de esposas de sindicalistas, amigos de Juan Lanzas’, censura Alaya.
Tras el hallazgo de sobres con más de 80.000 euros en metálico ocultos en la maleta de una máquina de escribir bajo la cama, en la casa de los padres de Lanzas, la Guardia Civil ha realizado un nuevo registro, en este caso con un georadar, para buscar un posible zulo donde hubiese más dinero o documentación.
Los agentes emplean el georadar para saber ‘si los estratos de la tierra presentan distorsiones en la zona, en la que se piensa que podría estar enterrado el dinero o la documentación que se haya podido ocultar’, según han señalado diversas fuentes de la investigación.
Ahora, la Fiscalía Anticorrupción decidirá asimismo si solicita la drástica medida de prisión para los testaferros que supuestamente participaron en el reparto de comisiones ilegales en sobres: Juan Francisco Algarín, Eduardo Leal y Beatriz Núñez.