La Peña Flamenca de Almonte vuelve a la normalidad. Aunque más bien, a una normalidad intermedia. Las clases de guitarra y cante vuelven a realizarse presencialmente.
Así, de hecho, lo constatan la presidenta de la entidad, Alejandra Almendro, y el cantaor y profesor Jeromo Segura, que aseguran que es una gran alegría para todos.
Y decíamos intermedia porque, como marca la ley y las medidas recomendadas, maestros y alumnos deben guardar las indicaciones sobre higiene y distancia social. Pero al menos los quejíos de la guitarra y los ecos de los distintos palos flamencos vuelven a escucharse en vivo y en directo. El propio Jeromo Segura afirmaba que no era lo mismo el sonido de una guitarra desde el ordenador que en persona.
Cada miércoles por la tarde, dirigidos por Luis Miguel Cano y Jeromo Segura, unos 80 alumnos reciben clases de perfeccionamiento de una afición por algo tan nuestro como es esta expresión cultural, Patrimonio Inmaterial de la Humanidad.