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La provincia de Almería produce vinos con las características propias de un clima de bruscos cambios de temperatura y lluvia escasa

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No es el vino de Almería el más conocido de Andalucía. Pero aun así es la provincia andaluza que cuenta con más Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP), cinco en total: Ribera del Andarax, Láujar-Alpujarra, Desierto de Almería, Sierras de Las Estancias y Los Filabres y Norte de Almería.

Los vinos de la tierra que se producen en Almería tienen las características propias de una uva criada bajo un clima extremo, con bruscos cambios de temperatura y precipitaciones escasas. Las principales variedades que se cultivan en la zona son Tempranillo y Macabeo, la primera tinta y la segunda blanca. Ambas son uvas eminentemente mediterráneas. La primera es la uva tinta española por excelencia y la segunda es una uva de origen asiático, pero presente en la Península Ibérica desde la antigüedad.

También se cultivan otras variedades, como Airén, Chardonay o Savignon Blanc, entre las uvas blancas, o Cavernet Sauvignon, Merlot, Monastrell o Syrah. Hasta no hace mucho, el vino que se producía en Almería estaba destinado a un consumo local. Pero el reconocimiento que suponen las IGP, que llegó a partir de 2004, los ha convertido en caldos reconocidos y apreciados más allá del territorio en el que brotan.

Vino de la Tierra Norte de Almería

Esta IGP comprende las poblaciones de Chirivel, María, Vélez-Blanco y VélezRubio, localizadas en la parte más septentrional de la provincia, en los límites con la Región de Murcia y la provincia de Granada. El reglamento por el que se rige la Indicación Geográfica Protegida Vino de la Tierra Norte de Almería prohíbe de manera expresa la utilización de variedades modificadas genéticamente. La zona produce tintos, blancos y rosados. Los blancos y rosados son frescos y ácidos, y en el caso de los blancos con una  riqueza de aromas que recuerda a frutos como limón, grosella y espárragos. Los tintos tienen mucho cuerpo y un sabor a frambuesa, zarzamora y regaliz, y los tintos envejecidos son ricos en alcohol y acidez moderada, sin producir un déficit de la suavidad en el caso de la elaboración en barricas.

Las variedades de uva autorizadas que se producen en la zona son Airen, Chardonnay, Macabeo y Sauvignon Blanc, como variedades blancas y en tintas Cabernet Sauvignon, Merlot, Monastrell, Tempranillo y Syrah. La reputación de los vinos con la indicación geográfica «Norte de Almería» fue reconocida en mayo de 2008.

Vino de la Tierra de las Sierras de Las Estancias y Los Filabres

El Reglamento de esta IGP data, como el anterior, de 2008. La misma engloba a los vinos producidos en los municipios de las sierras homónimas, que se extiende por los términos de Alcóntar, Serón, Bacares, Bayarque, Tíjola, Armuña, Sierro, Suflí, Lúcar, Somontín, Urrácal, Purchena, Olula del Río, Macael, Laroya, Fines, Partaloa, Oria, Líjar, Chercos, Albánchez, Cóbdar, Cantoria, Albox, Taberno, Arboleas y Zurgena. Es la zona vitivinícola más extensa de la provincia.

Además de las habituales en el resto de la provincia, también se cultiva la variedad uva Moscatel de grano menudo o Morisco, entre las blancas, y Garnacha tinta , Pinot Noir y Petit Verdot entre las variedades tintas. La zona produce vino blancos jóvenes o fermentados en barrica, rosados y tintos jóvenes y con crianza en barrica y botella.

La singularidad de estos vinos radica en la combinación del suelo del valle, el elevado número de horas de sol al año y a la altitud de la zona (entre 800 y 1.200 metros). Los vinos blancos presentan aromas florales, recuerdos de hierba del monte seco. Los vinos rosados son gratos, equilibrados, potentes y afrutados (grosellas, frambuesa) con toques de golosinas y de gran intensidad y potencia, mientras que los tintos tienen mucha intensidad con gran potencia y presentan aromas a frutos negros, pasas, confituras, notas lácteas y florales y toques balsámicos.

Vino de la Tierra del Desierto de Almería

Esta zona linda con la Sierra de Alhamilla, la Sierra de Cabrera y el Parque Natural Cabo de Gata-Níjar. Sus viñedos se extienden en pleno desierto de Almería, a una altitud media de 500 metros sobre el nivel del mar. Las características geográficas y, muy especialmente, el particular choque climático  del desierto, con días cálidos y noches frescas en época de maduración, junto con las características geomorfológicas y edafológicas, proporciona unas características singulares a sus vinos.

Abarca los términos municipales de Alcudia de Monteagud, Benitagla, Benizalón, Castro de Filabres, Lubrín, Lucainena de las Torres, Olula de Castro, Senés, Sorbas, Tabernas, Tahal, Turrillas, Uleila del Campo y Velefique. El reglamento de la IGP es de 2003. Produce vinos blancos (de las variedades Macabeo, Chardonnay, Moscatel y Sauvignon Blanc), rosados y tintos (Garnacha, Monastrell, Syrah, Cabernet Sauvignon y Merlot). La reputación de los vinos con la indicación geográfica «Desierto de Almería» fue reconocida en julio de 2003.

Vino de la Tierra Ribera del Andarax

La zona vitivinícola de la Ribera del Andarax se encuentra en el curso medio del río y la mayoría de los viñedos se extienden entre los 700 y los 900 metros de altitud, en suelos de pizarra, arcilla y arenisca. La indicación geográfica ampara a 21 municipios de la provincia de Almería: Alboloduy, Alhabia, Alhama de Almería, Alicún, Almócita, Alsodux, Beires, Bentarique, Canjáyar, Enix, Félix,
Gérgal, Huécija, Íllar, Instinción, Nacimiento, Ohanes, Padules, Rágol, Santa Cruz de Marchena y Terque.

Tradicionalmente la producción ha estado orientada hacia una variedad muy peculiar de uva de mesa, la Ohanes, en honor al municipio del que es originaria. Fue reglamentada por la Junta de Andalucía en 2003. Las variedades de uva autorizadas son Macabeo, Chardonnay y Sauvignon Blanc, entre las blancas, y las tintas Tempranillo, Cabernet Sauvignon, Merlot, Syrah, Garnacha, Monastrell y Pinot Noir.

Sus vinos blancos presentan aromas primarios típicos de las uvas empleadas, olor a frutas verdes y frescas por la acidez natural que le confiere la altitud de las zonas de cultivo. Los rosados son ligeros, frescos y con sabor a fruta fresca, mientras que los tintos son agradables al paladar, sedosos y redondos.

Vino de la Tierra Láujar-Alpujarra

Entre Sierra Nevada y la Sierra de Gádor, en la parte alta de la cuenca del río Andarax, se encuentra esta comarca con un sector vitivinícola en pleno auge. Además de continuar elaborando el vino típico de la zona, el clarete o rosado, en la IGP se investigan nuevas variedades bajo un concepto basado en la producción de vino de calidad. Vino de la Tierra Laujar-Alpujarra es una indicación geográfica utilizada para designar los vinos de la Alpujarra oriental, que abarca los términos de Alcolea, Fondón, y Laujar de Andarax. Utiliza las variedades blancas Jaén blanco, Macabeo, Vijiriego o Vijiriega, Pedro Ximénez, Chardonnay, Viognier y Moscatel de grano menudo. Entre las tintas, Garnacha tinta, Pinot Noir, Petit Verdot, Monastrell, Syrah, Cabernet Sauvignon, Tempranillo y Merlot.

Los vinos blancos son de color amarillo pálido, brillantes, con aromas primarios florales muy intensos y complejos, conseguidos con una fermentación controlada a baja temperatura. Los vinos rosados son frescos y sabrosos en boca y muy equilibrados con excelente bouquet. Los tintos jóvenes son límpios, muy afrutados y algo especiados, características conseguidas con el tiempo justo de permanencia en barrica nueva de roble, mientras que los tintos con envejecimiento presentan aromas de frutos maduros y vainilla. La reputación de sus vinos fue reconocida en el año 2004.

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