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La complejidad y envergadura del montaje para el exorno de la plaza Virgen del Rocío con motivo de la próxima “Venida”, como popularmente se denomina al traslado de la Virgen del Rocío a la localidad de Almonte cada siete años, ha supuesto que el Ayuntamiento inicie ya los trabajos preparatorios. El acontecimiento tendrá lugar en el mes de agosto del año que viene.
Esta semana se han llevado a los talleres municipales los arcos que formaron parte del impresionante templete gótico instalado para el exorno de la citada plaza en la última Venida de la Virgen. Durante los últimos cinco años, las piezas han permanecido en la nave industrial que posee el Ayuntamiento en el polígono Matalagrana. Los operarios proceden ahora a la reparación de la madera, y a su primer montaje, para comprobar que encajan. Si la madera no ha sufrido desajustes por el paso del tiempo, se iniciarán los trabajos de forrado con tiras de papel blanco rizado, tal y como marca la tradición.
La concejala de Servicios, Loli Cáceres, ha manifestado hoy que “empezamos con una tarea que ilusiona a todos los almonteños: la preparación de los arcos para la Venida de la Virgen. El traslado desde su ermita hasta Almonte, que tendrá lugar tras la celebración del Rocío Chico del año próximo, es un asunto prioritario para el Ayuntamiento, y conlleva al menos un año de dedicación. La idea es que el exorno de la plaza esté listo a comienzos del verano de 2012, a fin de que los turistas puedan admirar una obra de esta envergadura”.
