La presidenta de la Diputación de Huelva, María Eugenia Limón, ha visitado este miércoles la zona afectada por el incendio forestal de Lucena del Puerto y ha mostrado la “solidaridad” de la institución provincial con todos los vecinos del municipio, al tiempo que ha vuelto a hacer una llamamiento a la “precaución” y la “concienciación”, frente los fuegos que se generan en la provincia en verano.

Así lo ha indicado en declaraciones a los medios durante esta visita, en la que ha estado acompañada por el alcalde de la localidad, Manuel Mora, y en la que ha destacado la “solidaridad” de la ciudadanía onubense que “aflora cuando estamos ante momentos tan penosos y dramáticos como el vivido ayer por la tarde”.

En este punto, ha subrayado que los agricultores, tanto de Lucena como de municipios cercanos como Moguer, Bonares o San Juan del Puerto, “hicieron una magnífica labor” de ayuda “junto a los voluntarios de Protección Civil, que se movilizaron desde toda la comarca e hicieron una gran actuación”.

Finalmente, Limón ha reseñado la labor del alcalde de Lucena “que como todos los alcaldes de los pueblos pequeños, tienen que dirigir las actuaciones hasta que llegan los profesionales”, a la par que ha agradecido la labor de los efectivos del Plan Infoca, del Consorcio de Bomberos y de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado “que lograron estabilizar el incendio, lo que hizo que los vecinos pudieran pasar una noche más tranquila”.

Por su parte, Manuel Mora ha destacado la “dureza del incendio”, que hizo que se encontrara con un panorama “dantesco” con los vecinos por la calle “intentando apagar con sus medios” el fuego, al tiempo que actuaban los medios aéreos y “mientras esperaban la llegada de los efectivos que trabajan por tierra y los miembros del punto de coordinación”.

Así, el alcalde ha señalado que “afortunadamente, a partir de las ocho de la tarde empezó a controlarse la situación”, toda vez que ha apuntado que “ahora mismo hay una zona caliente que se está enfriando y se ha perimetrado” a la cual “se le está echando agua para que se consuma el combustible y que definitivamente la apaguen los aviones porque es una zona muy escarpada”.

De este modo, ha explicado que “aunque hay mucho humo” en otras zonas, “no existe riesgo real ninguno”, por lo que cree que el incendio “estará controlado en poco tiempo” si no hay una activación de la zona caliente.