El esclarecimiento del doble crimen de Almonte continúa a la espera de las pruebas que el Instituto Nacional de Toxicología está realizando a una manta encontrada en la vivienda donde ocurrieron los hechos.
Así las cosas, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de La Palma del Condado ordenó la reapertura de la causa de los asesinatos de Miguel Ángel y María tras la ratificación del Tribunal Supremo de la absolución del único acusado, al tiempo que un nuevo equipo de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil se puso al frente de la nueva investigación.
Este mismo juzgado acordó el pasado mes de julio la prórroga de otros seis meses más de la instrucción, dado que la Fiscalía y la acusación particular la solicitaron «por que hay determinados preceptos que posibilitaban la misma», ya que «las pruebas de toxicología, de una manta, «podrían determinar la autoría de la persona», según apuntó el abogado de la familia.
Por otro lado, Aníbal Domínguez, tío y hermano de los fallecidos, se ha mostrado también «esperanzado» por esta nueva ampliación, pero ha asegurado que la familia sigue esperando de «forma inminente» el análisis de la manta por parte de Toxicología porque «puede ser determinante para el caso».
Al respecto, sobre la manta que analiza el Instituto Nacional de Toxicología, en un auto emitido el pasado mes de diciembre se remarcaba que se trata de «una evidencia de grandes dimensiones, una manta de 2,40 por 1,60 metros en la que se les solicitó la búsqueda de posibles restos celulares ajenos a las víctimas».
Además, señalaban que «se ha llevado a cabo una selección minuciosa, dando como resultado un elevado número de muestras para llevar a cabo los correspondientes análisis», por lo que, una vez finalizados, se emitirá el informe.
Foto: A. Pérez