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El Pleno de Almonte, celebrado en sesión extraordinaria, no ha podido sacar adelante los puntos propuestos por Ilusiona y la concejala no adscrita para suspender la cesión del ciclo integral del agua a GIAHSA, concedida por un año tras la finalización de contrato con Aqualia, y provocar la salida del municipio almonteño de la Mancomunidad de Servicios (MAS), a pesar de contar con 10 votos a favor frente a los 8 del equipo de Gobierno en contra. El motivo es la necesidad de la mayoría absoluta para alcanzar tal fin, algo recogido en la Ley de Bases del Régimen Local.
El Partido Popular, con sus tres concejales, se ha abstenido en dicha votación. El motivo es que, a su juicio, no se tienen los informes económicos y legales necesarios para tomar una determinación tan importante, como es la nueva licitación del servicio y puesta en marcha del pliego de condiciones, algo “que deberá realizar la nueva Corporación Municipal”, ya que restan cuatro meses para las elecciones municipales.
Aun así, la portavoz popular ha advertido de que “este proceso debería haberse llevado a cabo con la suficiente antelación a la terminación del contrato”, por lo que tampoco se puede considerar esta postura como una defensa a la alcaldesa, Rocío del Mar Castellano, que, de nuevo, se ha visto envuelta en una polémica, con graves acusaciones y ‘dimes y diretes’ con los miembros de la oposición.
