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Cada vez cobra más relevancia el conocimiento del papel femenino en el entorno rural, muchas veces eclipsado y denostado. La mujer ha tenido tradicionalmente un protagonismo limitado en toda la actividad del garbanzo, casi siempre relacionada con el uso de esta legumbre en la alimentación y la cocina.
Por ello, el Consejo Regulador de la Indicación Geográfica Protegida ‘Garbanzo de Escacena’ ha puesto en marcha, por segundo año, la acción “Embajadoras del Garbanzo”.
En esta ocasión, la campaña ha querido centrarse en el trabajo de diferentes mujeres en el territorio donde se produce esta legumbre y sus aportaciones en los ámbitos de la actividad agrícola y empresarial, la promoción exterior, y la investigación en el sector, al ocupar puestos de responsabilidad en Empresas, Entidades y Administraciones.
Esta iniciativa forma parte del plan que impulsa la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible de la Junta de Andalucía para la promoción en el mercado interior de productos agroalimentarios.
