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El Hospital Infanta Elena ha puesto en marcha una nueva edición de su programa de sensibilización en violencia de género con el objetivo de concienciar a los profesionales sanitarios acerca de la importancia de este problema y recordarles las señales de alarma que deben hacer sospechar en cada situación. El objetivo no es otro que incidir en la detección precoz de situaciones de maltrato a la mujer, mejorando la atención a las víctimas de violencia de género, así como a sus hijos e hijas.
Las sesiones formativas, que se vienen desarrollando durante las últimas semanas y han estado dirigidas a diferentes colectivos profesionales, se han organizado en un marco más flexible de asistencia dentro de su jornada laboral, para facilitar la participación del mayor número de trabajadores, sobre todo en el ámbito médico y enfermero procedentes de aquellas unidades que se convierten habitualmente en la puerta de entrada de las mujeres en esta situación.
Esta apuesta por la renovación del programa viene dada por la convicción de la Consejería de Salud y Consumo, en el marco del Pacto de Estado para la Violencia de Género, de que la violencia contra la mujer constituye un grave problema de salud pública y una violación de los derechos humanos. La directora gerente del Hospital Infanta Elena, Esperanza Quintero, ha destacado la importancia del sector sanitario “para proporcionar atención integral de salud a las mujeres que sufren violencia”, a la vez que ha invitado a las posibles víctimas “a confiar en nuestro apoyo si necesitan ayuda”.
En este sentido, la responsable del centro ha recordado también que el Infanta Elena está acreditado como Centro Comprometido con la Violencia de Género por la propia Consejería de Salud, precisamente por las medidas incorporadas en la organización del centro para una mejor atención a este problema.
En este caso, la campaña de sensibilización ha estado dirigida especialmente a los profesionales sanitarios más susceptibles de atender en un primer momento a la mujer que acude por este problema a un centro hospitalario y de ser los encargados de derivarlas a otros servicios de apoyo que puedan necesitar. La formación constituye una herramienta fundamental para poder detectar y abordar adecuadamente el maltrato o la violencia de género contra las mujeres y sus hijos, especialmente en aquellos casos en que la mujer no lo verbaliza o no presenta lesiones visibles.
En estas sesiones formativas, que se llevan a cabo en el salón de actos para los grupos más amplios y en las propias salas de trabajo de los profesionales, se traslada la importancia y la necesidad de estar alerta, de formarse adecuadamente para agudizar una mirada de género ante las pacientes que permita llegar a identificarlas, en caso necesario, como mujeres maltratadas o en riesgo de serlo.
Se incluye también en estas charlas información de interés sobre los recursos de apoyo con los que cuentan los profesionales dentro de las propias aplicaciones corporativas del Servicio Andaluz de Salud, ayudándoles así en la detección y poniendo a su disposición los protocolos de actuación existentes, los modelos y mecanismos de envío de partes al juzgado, o el uso de la aplicación móvil ACTÚA, que ayuda en la prevención y detección de la violencia de género en los centros sanitarios.
Entre las medidas que sobre formación en este ámbito se llevan a cabo, se encuentra también el acceso a la Red Formma, un servicio de formación continuada para el personal del Sistema Sanitario Público de Andalucía que incorpora también cursos y talleres formativos sobre atención a las mujeres en situación de maltrato, así como sobre las comisiones interdisciplinares de violencia de género.
