La presidenta del Consejo Andaluz de Arquitectos, Noemí Sanchís, ha exigido en el Congreso: ‘La Casa está ardiendo’, la necesidad de modificar la Ley de Contratos del Sector Público y sus exigencias de Solvencia Técnica, Solvencia Económica y los Plazos, “a fin de permitir un ejercicio digno de la profesión y la participación de todos los arquitectos y arquitectas, sin expulsar a las mujeres y a los jóvenes de la contratación pública”.
En este sentido, bastaría – según ha destacado la portavoz del colectivo – con aplicar las dos nuevas herramientas del Gobierno Central y el Autonómico, respectivamente, y que son “la Declaración de la Arquitectura como Bien de Interés General del Parlamento Andaluz y la Ley de Calidad de la Arquitectura nacional de junio de 2022”.
Sanchís, quien inauguró el Congreso junto al secretario general de Agenda Urbana, Vivienda y Arquitectura, Iñaqui Carnicero y la decana del Colegio de Sevilla, Nuria Canivell, ha abogado por que los pliegos de condiciones de las administraciones “incorporen verdaderos criterios de calidad y plazos de licitación y ejecución proporcionales a la complejidad del trabajo, sin condiciones como puntuar las ofertas económicas a la baja y otros requisitos que vulneran los derechos laborales básicos”.
Este primer Congreso de arquitectos y arquitectas tiene el propósito de “reunir a todo el oficio de la arquitectura para afrontar las condiciones de trabajo y evidenciar las problemáticas que afectan a cada perfil, así como elaborar propuestas en común que hagan frente a las mismas”.
El Congreso tendrá el próximo 17 una puesta en común abierta a medios, representantes públicos, y la ciudadanía en la que se expondrán las principales conclusiones y reivindicaciones.