El Consejo de Gobierno ha aprobado el inicio de la tramitación de la primera Estrategia de la Cadena de Valor de la Industria Agroalimentaria de Andalucía para el periodo 2024-2027, en la que colaborarán las consejerías de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural y de Industrias, Energía y Minas, y en la que se tendrán en cuenta para su elaboración las necesidades del sector andaluz a través de un diálogo fluido y constante con todos los agentes económicos y sociales de Andalucía.
Con esta estrategia, la Junta de Andalucía persigue mejorar la competitividad de la industria agroalimentaria andaluza, apostando por su adaptación a las exigencias del mercado actual y futuro; y gracias a la relación directa con la sociedad de la comunidad autónoma, el Gobierno andaluz espera poder dar respuesta a las necesidades del sector al máximo nivel posible.
La agroindustria andaluza es actualmente sinónimo de seguridad alimentaria, sostenibilidad y calidad de los productos, ámbitos en los que es preciso seguir incidiendo al mismo tiempo que se suman otras premisas que preocupan a los consumidores. Entre los nuevos desafíos se encuentra, por ejemplo, continuar avanzando en la incorporación de aspectos relacionados con el impacto ambiental, la salud, la nutrición o la equidad en el acceso a los alimentos.
El sector agroalimentario es uno de los pilares de Andalucía y, además de su necesaria labor para satisfacer la creciente demanda de alimentos, esta producción tiene también un relevante impacto en la economía, la sociedad y la salud, entre otros ámbitos. La actividad agroalimentaria andaluza es líder a nivel nacional al alcanzar los 19.440 millones de euros de Valor Agregado Bruto (VAB) que suponen el 19,5% del total del país; y rozando los 489.500 empleos, concentrando casi el 22% de las personas ocupadas en este sector en España.
En el caso concreto de la industria agroalimentaria, el tejido empresarial andaluz supera las 5.600 entidades (18,5% de España), que prácticamente en su totalidad son pymes con una plantilla de menos de 250 personas. En términos económicos, la agroindustria ocupa el segundo lugar en la producción industrial de Andalucía al representar el 18% del VAB de este ámbito en Andalucía. En cuanto a su ámbito territorial, las industrias agroalimentarias se reparten por prácticamente todo el territorio andaluz, destacando especialmente en el centro y el valle del Guadalquivir. Buena parte de esta actividad se desarrolla en zonas rurales, por lo que contribuye activamente a la fijación de la población en estas áreas.
Esta iniciativa de apoyo al sector agroindustrial andaluz se suma a otras medidas que desarrolla el Gobierno andaluz a través de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural para respaldar a los productores, como la tramitación de diversas ayudas. Este es el caso, por ejemplo, de las subvenciones que respaldan inversiones materiales e inmateriales en transformación, comercialización o desarrollo de nuevos productos agrícolas en el ámbito del olivar, cuya última convocatoria se encuentra actualmente en período de solicitud. Con un presupuesto de 20 millones de euros, estos incentivos se destinan tanto a proyectos ligados a la producción de aceite de oliva como de aceituna de mesa.
Entre otros fines, estas ayudas persiguen facilitar la mejora tecnológica de los procesos de manipulación y transformación de los productos agrícolas y de sus canales de comercialización. Por esta razón, se subvencionan medidas encaminadas a la mejora del aprovechamiento de los subproductos, al fomento de la diversificación y al impulso de la eficiencia hídrica y energética.
En cuanto al sector agroalimentario andaluz en general, el respaldo del Gobierno andaluz se plasma en iniciativas como la firma de un acuerdo marco de colaboración entre el Instituto Andaluz de Investigación y Formación Agraria y Pesquera de Andalucía (Ifapa) y la organización empresarial Landaluz. Esta cooperación público-privada nace con el objetivo de servir de base para la creación del primer clúster agroalimentario de Andalucía, que se espera que contribuya a mantener el liderazgo de este sector andaluz al atraer nuevas oportunidades. El equipo de trabajo centrado en la consecución de este objetivo contará también con el respaldo de universidades andaluzas y del centro Tecnova para, entre todos, impulsar un salto en investigación y tecnología en el sector agroalimentario de Andalucía.