Doñana ha cerrado el pasado año 2023 alcanzando una temperatura media anual histórica, caracteriza por contar con un clima seco y cálido.
A este escenario hay que sumar la “escasa inundación” en las marismas y las lagunas que ha ocasionado una menor presencia del número de aves acuáticas invernantes y ha generado el declive de la población de estas aves.
Estos datos han sido arrojados por el estudio ‘Estado de la biodiversidad en Doñana’, elaborado por la Infraestructura Científica Técnica Singular – Reserva Biológica de Doñana (ICTS-Doñana).
Este informe detalla que desde septiembre de 2022, hasta agosto de 2023 Doñana se ha caracterizado por contar un clima “muy seco y cálido”, ya que lleva acumulando más de una década niveles de precipitación por debajo de la media sobre todo en los dos últimos años.