Así era el momento en el que la Cruz de la Calle la Fuente de Rociana daba comienzo al segundo Rosario Magno en su honor.
Un evento que ha contado con la participación de una treintena de hermandades locales y de la provincia de Huelva que no han querido faltar a esta cita que pasa ya para la historia.
Bajo los sones de Las Cigarreras, los hermanos calatravas disfrutaron de estampas que no se volverán a repetir hasta dentro de 10 años.
Una noche de ensueño, de volver a vivir junto a la Cruz momentos únicos y de unión, ya que todo se ha dado a conocer todo el rico patrimonio y legado cultural que la localidad posee, exponiendo a todas las Cruces que en la actualidad no procesionan.