Por Los devotos de la Cruz de la Calle Cabo, de La Palma, tuvieron el pasado fin de semana un avance de sus fiestas, que se celebran a final del mes de mayo. En concreto, los bartolos que es como se conocen a los devotos de esta cruz, disfrutaron del triduo, del pregón y de la exaltación, así como del traslado del Santo Madero desde la Iglesia hasta su ermita.
Un traslado que fue más rápido de lo habitual debido a las inclemencias meteorológicas, pero que no por ello fue menos emotivo para los cruceros palmerinos. El traslado puso el broche final a un fin de semana bartolo que comenzaba el viernes con el primer día de triduo.
Los cultos han incluido cada día el rezo del Rosario, el ejercicio del Triduo y la santa misa con homilía, ocupando la Sagrada Cátedra el reverendo Cristóbal Robledo Rodríguez, director espiritual del Seminario Diocesano de Huelva.
El sábado, además, se celebró el Pregón bartolo que alcanzaba este año su edición número 44 y estuvo ofrecido por el palmerino Manuel Valdayo.
El domingo tras la celebración del último día de Triduo, la Santa Cruz fue exaltada en su paso para proceder a su traslado dando así a los bartolos uno de los momentos que se viven con mayor intensidad y de los más esperados durante todo el año.
Los vivas y la emoción se dejaron sentir en el interior de la Iglesia Parroquial palmerina donde se habían concentrado cientos de devotos para asistir a este momento. Con el traslado de la Cruz de la Calle Cabo a su capilla, los bartolos inician la cuenta atrás para vivir sus fiestas que se celebrarán el último fin de semana de mayo.
