El fotógrafo freelance Antonio Camoyán ha explicado la importancia que tiene la fotografía como medio de difusión para acercar la flora y la fauna, y ha resaltado las cualidades de Andalucía, que «es una región única en paisajes propicios para el trabajo fotográfico», donde destaca el colorido del Río Tinto, una de sus mayores pasiones en esta tarea.
Este vínculo entre la fotografía y la naturaleza es la columna vertebral del curso ‘Fotografía y ciencia en el medio natural’ presentado este jueves en rueda de prensa en el campus de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) en La Rábida, con la intervención también de su director, Héctor Garrido Guil; el fotógrafo naturalista Antonio Atienza; y la moderación de la directora del campus, Yolanda Pelayo.
Héctor Garrido, cuyas fotografías de las marismas atlánticas inspiraron ‘La isla mínima’, ha mostrado su satisfacción con el desarrollo del curso gracias a la interacción de los alumnos, que han podido ver una demostración de vuelo con un dron en las clases del profesor y fotoperiodista Francisco Márquez. Esta tarde recorrerán el paisaje del Río Tinto para analizar la esencia de la fotografía de la naturaleza, además de «contemplar su belleza», en palabras de Camoyán.
Por otro lado, el curso ha sido todo un referente en esta disciplina «compleja y que requiere sensibilidad», según Antonio Atienza. El naturalista ha querido hacer hincapié en el valor turístico y ecológico que presenta Andalucía, puesto que «estamos en un sitio privilegiado».
El curso ‘Fotografía y ciencia en el medio natural’, que organiza la UNIA en el campus de La Rábida, ha contado con la colaboración de la Fundación Descubre, el CSIC y la Estación Biológica de Doñana.