Los villarraseros han vivido este viernes el Día Grande de la Patrona. La tradicional procesión, precedida de la Función en la Iglesia, ha estado marcada, un año más, por el fervor y la fe que este pueblo profesa a la Virgen de los Remedios.
La Patrona fue trasladada en la tarde del 17 hasta la Iglesia Parroquial, lugar desde el que salía en procesión el viernes tras la Misa. Como acompañamiento musical, por primera vez, la Escuela Municipal de música. Integrada por un grupo de jóvenes que buscan perpetuar la tradición musical de esta localidad.
La virgen, portada por costaleros, ha visitado a los enfermos repartiendo los característicos nardos y haciendo la conocida Bendición con la entrega de romero que da la bienvenida a la Navidad.
Tras la procesión, la curiosa ‘puja’. Todo un acto que refleja la tradición y la fe hacia la la mayor devoción mariana de este municipio condal.
Tras la procesión y la puja, la virgen regresaba a su camarín en la ermita, lugar que acogía una celebración de Accion de Gracias.