Desde el pasado mes de agosto, un olor “desagradable” invade las calles de Almonte. Los vecinos elevan sus quejas al ayuntamiento y es entonces cuando el consistorio, así lo explican sus concejales, se ponen manos a la obra. El primer paso era saber de dónde provenía el olor. Tras un informe de la Policía Local y la Guardería Rural, se determina que el origen es la planta de reciclaje y compostaje de El Raigal.
Se trata de una empresa que tiene licencia de actividad desde el año 2005 y que, en 2012, pasó a manos de otra gerencia. Eso sí, continuando con la misma actividad: el tratamiento de lodos de Depuradoras de Aguas Residuales y de Estaciones de Tratamiento de Agua Potable para la obtención de abonos orgánicos. Pero si lleva funcionando desde 2012, ¿por qué han surgido los olores en este momento?
El ayuntamiento de Almonte asegura haberse reunido en varias ocasiones con la empresa. La primera medida que se ha tomado ha sido cambiar la ruta de los camiones de lodo, algo que ha mitigado el problema. Pero hay otras medidas en marcha.
La planta de reciclaje y compostaje está situada a menos de tres kilómetros del área metropolitana del municipio almonteño.