Alejandro Ceballos, ya ex-entrenador del Recreativo de Huelva, ha acudido esta mañana a la Ciudad Deportiva del Decano para despedirse del personal deportivo y plantilla y posteriormente ofrecer su última rueda de prensa, una vez conocida su destitución ayer noche como máximo responsable albiazul. Ceballos, que ha estado acompañado por Manolo Zambrano, presidente del Decano, en su despedida, ha leído una carta.
“Para mí ha sido un gran orgullo haber representado al Recreativo de Huelva en estas dos etapas. Mis dos palabras en mi marcha son tristeza y agradecimiento, tristeza porque es el último día en el este gran club. Esta experiencia en mi vida me va a reportar mucho en mi futuro. No soy nadie para pregonar, pero todos los que sienten y aman estos colores que remen en una sola dirección independiente de los egos e intereses personales”. Agradecimiento a mi plantilla, por su profesionalidad que me hizo sentir un entrenador feliz ante todas las adversidades vividas; a mi cuerpo técnico, a todos los que han hecho posible hacer más fáciles el ejercicio de mi profesión; al resto de estamentos y empleados del club en general; a todos los profesionales de los medios de comunicación, en especial a los que estuvieron a mi lado y; a la afición, con la que me quedo con todo lo que me han dado, a mí y a mi familia, sobre todo en la pasada campaña”.
Ceballos estaba convencido de que podía sacar esta situación hacia delante. “Llegaban ahora tres partidos muy importantes para revertir esta situación pero el Consejo ha pensado que había que tomar otro rumbo, soy hombre de fútbol y tengo que aceptarlo. No quiero ahondar más en mi salida, ni es el día ni el momento, todos conocemos las circunstancias, pero no es el momento ni es el día para hablar. “Voy a seguir apoyando al club y no voy a entrar en las razones de las salidas. Me voy muy tranquilo, con la cabeza muy alta, todo es mejorable y esta experiencia me va a servir para mi futuro. No me arrepiento de haber firmado en agosto, tenía que decidir en unas horas y tomé una decisión, no ha salido bien pero también tengo mucha gente que está a mi lado. Para mí hay una verdad, para Pavón hay otra verdad y Toledano ha vivido mi situación. No ha habido maldad porque si no mi contrato no sería el que es. Esta era mi segunda oportunidad en el Recreativo y no me arrepiento lo que hice. Hasta cualquier crítica me va a servir para intentar reconstruirla y seguir con este veneno del fútbol. Tengo que aceptar mi cese porque como entrenador no me queda más remedio”.