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El Coordinador Provincial de Izquierda Unida en Huelva, Rafael Sánchez Rufo, ha expuesto hoy en rueda de prensa “los objetivos políticos con los que vamos afrontar en Huelva este año 2018 que acaba de empezar. Estos pasan por mantener una lucha constante contra la precariedad laboral que sufre la población onubense, contra la brecha salarial que somete a las mujeres a las peores condiciones laborales y en defensa de nuestros espacios naturales seriamente amenazados y de las infraestructuras y los servicios públicos que los sucesivos gobiernos del PP y del PSOE tienen totalmente abandonados en nuestra provincia”. Para ello, el dirigente provincial de Izquierda Unida en Huelva explica que “la formación de un bloque político alternativo y la movilización social son las herramientas que nuestra provincia necesita para salir de esta situación de marginalidad social y económica”. Sánchez Rufo ha añadido que si el PP, el PSOE y Ciudadanos son los Reyes Magos que les ha tocado a Huelva, estamos condenados a seguir recibiendo carbón de las administraciones que estas formaciones controlan”.
En este sentido, Sánchez Rufo ha denunciado que “mientras las inversiones estatales para la provincia de Huelva se quedan en casi nada, el Gobierno de Rajoy vuelve a concederle a la multinacional Gas Natural 6,3 millones de euros para su proyecto gasístico en Doñana. Esto demuestra que la política medioambiental del PP para Huelva es la misma que la Donald Trump”. Sánchez Rufo denuncia que el gobierno de Rajoy “no tiene ninguna intención por preservar nuestros valiosos espacios naturales, aunque estén protegidos, como es el caso de Doñana, sino convertirlo en un inmenso almacén subterráneo de gas para que sus amigos se enriquezcan con proyectos que no van a generar nada de empleo ni de riqueza para Huelva, sino por el contrario, llevarse por delante todo este patrimonio medioambiental, como ya ha ocurrido en demasiadas ocasiones en nuestra provincia”. Ante ello, Sánchez Rufo le exige a la Junta de Andalucía que “se deje de titulares de prensa y se ponga manos a la obra desde su responsabilidad de gobierno en Andalucía, para frenar de una vez por todas el proyecto de Gas Natural, claramente apoyado desde el ejecutivo de Madrid”.
Por su parte, Silvia Zambrano se ha referido a “las brutales condiciones laborales que sufrimos las mujeres en Huelva, donde la brecha salarial es de 5.000 euros de diferencia entre hombres y mujeres, lo que supone que desde el mes de septiembre las mujeres onubenses trabajamos gratis, al ser la brecha salarial más alta de todo el país”. Zambrano añade que esta discriminación de género se extiende a las pensiones, donde las pensionistas onubenses cobran de media de casi 400 euros menos que los hombres jubilados. “Todas estas desigualdades generan una mayor incidencia en la pobreza y en la vida diaria de las mujeres onubenses”, señala Zambrano.
A estos datos, hay que añadir que los salarios en Huelva son de los más bajos de todo el país, donde los menores de 35 años cobran una media de 322 euros mensuales y donde el 55% de la población asalariada, casi 130.000 personas, sobreviven con sueldos inferiores al Salario Mínimo Interprofesional. Mientras que la ridícula subida de las pensiones, recientemente aprobada por el gobierno del PP, supone que las personas jubiladas tengan una subida media de tan sólo dos euros mensuales. Ante esta situación de “pobreza y precariedad masivas, asistimos a cómo las grandes fortunas crecen y se consolida un modelo de salida de la crisis basado en la desigualdad social que sólo podrá ser derrotado a base de movilización social y unidad entre las fuerzas de izquierdas, dispuestas a luchar por los derechos de la mayoría social”, según ha precisado Zambrano.
Por último, Sánchez Rufo ha señalado que “venimos de un año 2017 que ha resultado nefasto en todos los sentidos para la provincia de Huelva, donde no sólo se ha seguido empobreciendo a la mayoría de la población, sino que nuestros recursos naturales, como es Doñana, han sufrido daños constantes como el del incendio de este verano, y las inversiones en infraestructuras y en servicios públicos se han quedado en casi nada”.
