La unidad promesas de la policía local de Almonte es un ejemplo de coordinación y de trabajo ejemplar frente a la violencia de género y en la lucha en favor de los menores en riesgo de exclusión. En relación con el absentismo escolar, el 31% de los alumnos vuelve de nuevo al colegio gracias a la intervención de esta unidad.
En cuanto a la lucha contra la violencia de género es fundamental labor y concienciación en los colegios, donde gracias a esta formación también se detectan casos. Esta información es fundamental puesto que cuando termina la clase, desde esta unidad se hace un seguimiento a los menores y a su familia para conseguir solventar esta dura situación. Otro de las iniciativas pioneras ha sido la creación de un expediente único.