El municipio de Almonte busca dar un paso más allá para la limpieza de su municipio, implantando una nueva medida que apuesta por la salud pública y por la mejora y de la convivencia y de la limpieza en las calles de la localidad.
Desde el consistorio almonteño, se busca aprobar en el Pleno del próximo 11 de enero la implantación del censo de ADN canino, siguiendo la estela de otros municipios españoles como Málaga, Alcalá de Henares o Cornellá.
Así, a través del reconocimiento legal del animal, que se realiza a través del chip, si no se recogen los excrementos, se pueden llegar a imponer sanciones de hasta 500 euros a los dueños de los cánidos.
Bajo el lema “No hay excusas: si es tu perro es tu caca” el consistorio pretende mejorar la convivencia y la limpieza de las calles y hacer que Almonte sea un municipio limpio y saludable.