La Guardia Civil ha abierto una investigación para determinar el motivo por el que este martes apareció abierta la puerta de la casa del asesino confeso de Laura Luelmo después que alguien rompiese el precinto establecido por las autoridades para que nadie accediese, según fuentes de la investigación que cita Vozpópuli.
En concreto, habrían sido los propios vecinos de la localidad de El Campillo donde se produjeron los hechos los que el día 1 dieron alerta a la Guardia Civil de que la casa estaba abierta.
Uno o varios desconocidos retiraron la brida que los agentes habían instalado en el domicilio en el que vivía Bernardo Montoya, cuya puerta fue encontrada parcialmente abierta.
Tras ser avisada la benemérita de esta circunstancia en la tarde del pasado martes, una patrulla se acercó al lugar.