Talleres culturales, escuelas deportivas y asociaciones se han volcado en Almonte para dar la bienvenida a la primavera. Con una temperatura propia de la fecha, centenares de personas disfrutaron de esta fiesta. Una celebración donde todos tienen cabida. Lo que se persigue, según la concejal de servicios sociales, es pasar una jornada de convivencia entre distintas generaciones.
Exhibiciones de yoga, zumba y judo, actuaciones de teatro y danza, partidos de fútbol y baloncesto. Todas estas actividades acompañadas por los mejores sabores del mundo. Y es que desde hace años, las entidades interculturales ofrece una gran variedad de dulces de diferentes países. La concejal ha querido destacar el trabajo del tejido asociativo en esta fiesta de la primavera.
Desde las seis de la tarde se sucedieron este sinfín de actividades que consiguió cumplir con el objetivo de los organizadores: una jornada de convivencia en torno a la cultura, la diversión y el deporte.