El Ayuntamiento de Almonte ha puesto en marcha un ambicioso plan de actuación para la limpieza y el mantenimiento del sistema de alcantarillado en sus tres núcleos de población. Unas tareas que se van a extender durante todo el curso, hasta junio de 2025, con un enfoque doble de limpieza correctiva y preventiva.
El sistema de alcantarillado que cubre Almonte, El Rocío y Matalascañas abarca más de 106 kilómetros de longitud, conectando 8.593 acometidas individuales y aproximadamente 4.561 imbornales. Aunque el estado general de la red es aceptable, existen áreas puntuales donde la antigüedad de las tuberías, su pendiente o diámetro reducido generan atascos de manera recurrente. Estas zonas han sido identificadas y recibirán una atención especial dentro de este plan.
El consistorio ha dividido su estrategia en dos tipos de intervención: limpieza correctiva y limpieza preventiva. En el caso de la primera, se activará de inmediato ante cualquier obstrucción comunicada, enviando personal especializado al punto afectado. Si el problema no se resuelve de forma inmediata, se tomarán las medidas oportunas para minimizar las molestias a los vecinos.
La limpieza preventiva, se centrará en zonas identificadas previamente; como problemáticas en la calle Santiago o Lorenzo Cruz, en Almonte, o el Paseo Marítimo, en Matalascañas. Zonas como estas serán revisadas dos veces al año, antes y después de la temporada estival, asegurando así la correcta eliminación de sedimentos mediante la aplicación de agua a presión.
La limpieza de los imbornales es otra de las áreas clave de este plan. Se limpiarán todos, registrándose cada intervención para un control exhaustivo. En caso de detectar problemas, se actuará rápidamente para corregirlos antes de que se conviertan en situaciones graves.
Enfoque especial en El Rocío
En El Rocío, se da una situación particular debido a las características arenosas del terreno, que provoca que la lluvia arrastre arena a las redes de alcantarillado, ocasionando obstrucciones frecuentes. Además, debido a la concentración masiva de personas durante la Romería, se requiere un plan específico.
La limpieza de la red de alcantarillado en la aldea se realizará de manera intensiva en los meses previos a la Romería, poniendo especial atención en las calles más transitadas, como Torre Carbonero, Torre La Higuera o Boca del Lobo. También, en las semanas previas a Pentecostés, se realizará una limpieza quincenal en las calles para garantizar el correcto funcionamiento del sistema.
La administración local ha subrayado que este plan responde no sólo a una necesidad técnica, sino también al firme compromiso del Ayuntamiento de Almonte por garantizar un entorno más limpio y seguro para todos sus ciudadanos. Este esfuerzo, que se lleva a cabo de manera constante y planificada, pone de relieve la importancia por el mantenimiento de infraestructuras esenciales para el desarrollo de la vida diaria, que repercute en el bienestar de los vecinos.