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Almonte vive su carnaval de una forma muy distinta. En esta semana han sido entregados los premios al concurso celebrado que, de alguna manera, ha querido invitar a los almonteños a ponerse su disfraz a pesar de la situación.
En la aldea del Rocío, la participación ha sido algo menor. No obstante, desde su concejalía se han mostrado muy agradecidos a los que han querido sumarse a la iniciativa, y han invitado a ponerse la máscara en años venideros.
En Matalascañas, como en el núcleo almonteño, han acudido disfrazados a recoger su premio, consistente en una bolsa de chucherías, un diploma y un talón para invertir en los comercios locales. Todo en una localidad que vive intensamente la fiesta de la alegría.
El concurso, junto con el documental sobre la historia del carnaval almonteño han centrado los eventos realizados para que, de alguna manera, el ‘febrerillo loco’ llegue al municipio en este año tan atípico.
