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Aracena cerró ayer domingo las puertas a la XXVII edición de la Feria Regional del Jamón y del Cerdo Ibérico, un evento que ha convertido a esta ciudad en capital del mejor jamón ibérico del mundo, de la mano de un evento que sigue creciendo y que este año ha estrenado su catalogación como Feria de Interés Turístico de Andalucía.
La jornada de ayer marcó el final de una edición marcada por una magnífica respuesta del público, que ha llenado el recinto ferial de la Avenida Reina de los Ángeles durante los dos fines de semana que se ha extendido la cita (del 18 al 27 de octubre), un espacio de más de 30.000 metros cuadrados donde el ibérico ha sido el absoluto protagonista.
El alcalde de Aracena, Manuel Guerra, ha mostrado su satisfacción por el desarrollo de esta 27ª edición de la Feria, “marcada por una excelente respuesta del público durante los dos fines de semana, que se ha visto reflejada también en mayores ventas para los industriales y empresas participantes en la cita, como han reconocido ellos mismos”.
“Esta respuesta nos hace estar muy satisfechos, por el esfuerzo que conlleva un evento de estas características, que tiene tras de sí el trabajo de muchas personas y que necesita tanto de la participación del público como de las empresas que eligen Aracena y esta Feria” comenta Manuel Guerra, quien destaca también la positiva valoración que realizan los industriales de esta Feria y sus instalaciones, “una importante apuesta realizada durante los últimos años por este Ayuntamiento, así como por mejorar la organización, limpieza, cuidados… todo para convertirnos en una Feria referente en España”.
El comité organizador tiene prevista una reunión de balance para los próximos días, para analizar mejoras que se puedan implementar a un modelo de celebración asentado y exitoso, como lo demuestran las 27 ediciones ya celebradas.
El cierre de la edición de 2024 lo marcó el sorteo público del concurso ‘Su Peso en Jamón’, una de las iniciativas más simpáticas y con participación de las que se celebran en la feria desde sus comienzos. Este año, un total de 2.507 personas han pasado por la báscula situada en el Pabellón Ferial, donde el equipo de azafatas tomaba nota en tarjetas y se incluían dentro de una urna sellada.
Una mano inocente fue la encargada de elegir la papeleta del ganador, ganadora en esta edición: Carmen Castro, de Sevilla, ha sido la persona agraciada con su propio peso traducido en jamones ibéricos, un total de 70,9 kilos que le serán entregados próximamente en un acto institucional.
