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La localidad de La Palma del Condado está inmersa en los trabajo de saneamiento y poda de los más de 1.300 naranjos que actualmente engalanan las calles palmerinas.
Un trabajo principalmente de poda que llega tras la recogida del propio fruto.
Una naranja amarga cuyo objetivo es de aprovechamiento y que se destina principalmente a la elaboración de una mermelada de la que se presume en toda la provincia. Además, desde el consistorio han señalado que este saneamiento va de la mano de otras acciones destinadas principalmente al mantenimiento de la jardinería palmerina.
Junto a estas labores, destacan iniciativas como la plantación de nuevas especies de árboles autóctonos que pretenden dotar a la localidad de mayor zonas de sombra y que irán plantadas en lugares como el Centro de Salud u otras localizaciones de La Palma del Condado.
