El Portal de Belén es un símbolo de la Navidad que no falta en ninguna casa y una tradición que personas como Manuela Gómez, belenista, mantienen viva en el tiempo a través de un oficio que cada vez más se está perdiendo.
En el mercadillo navideño de la localidad de Almonte, Manuela tiene un puesto donde poder adquirir auténticas piezas de artesanía para nuestros belenes: casas, animales, fruta… todo con una buena causa: colaborar con la Asociación Terapéutica la Tortuga de Almonte, ya que el importe íntegro de lo que compremos va destinado a las terapias que imparte la asociación para los niños con TDAH.
Este mercadillo navideño llena la Plaza Virgen del Rocío de la localidad de solidaridad y de ese espíritu tan propio de estas fechas como es ayudar a los demás y los almonteños no dudan en colaborar con causas como esta.