Bollullos Par del Condado ha dejado de ser referente en lo relacionado al vino pese a que, tradicionalmente, se ha considerado como una de sus principales señas de identidad.
Con el fin de realzar la relevancia del vino en la localidad bollullera, fue construido el Centro del Vino, que supuso la inversión de 2 millones de euros por parte de la Diputación Provincial onubense.
Sin embargo, la «incompresible dejadez» por parte del Ayuntamiento hacia dicho sector ha permitido que otras localidades del entorno, como La Palma del Condado y Chucena, hayan sabido apostar por este producto, lo que les está proporcionando una notable repercusión económica, social y cultural.
Esa es la sensación que existe en el municipio bollullero, donde en los últimos años se echan en falta iniciativas que tengan como eje el sector vitivinícola, que constituye una de sus principales fuentes de riqueza.
Bollullos, pese a ser sede del Consejo Regulador de la Denominación de Origen, asiste impávido ante el avance de actividades como la Feria de La Palma y la Fiesta de la Vendimia, que este año nombró como capataz al propio presidente de la Junta, Juanma Moreno, o la Feria del Vino de Chucena, que con solo tres ediciones ha supuesto un auténtico revulsivo en la localidad y en su entorno, promocionando este producto más allá de sus fronteras provinciales.
Las fuentes consultadas consideran que desde el Consistorio local deberían promoverse iniciativas contra la “desidia” y “falta de imaginación” en la que parece instalado el nuevo equipo de Gobierno para potenciar el sector del vino y recuperar la relevancia que tradicionalmente tuvo.
Se trata de un sector que necesita el “mimo” de la Administración más cercana, la local, y que ha hecho que La Palma y Chucena se estén consolidando como nuevos referentes en la industria vitivinícola.