El domingo de Resurrección es, sin duda, un día dulce para los bonariegos. Como marca la tradición Bonares dio ayer el pistoletazo de salida a las fiestas de las Cruces de Mayo con el conocido Día de los Dulces. La Cruz de la calle Misericordia será, este 2015, la protagonista de unos festejos con más de tres siglos de historia.
Tras la misa de alba, a primera hora de la mañana, el pueblo de Bonares se dispone a vivir uno de los días más dulces del año. El domingo de resurrección supone para los bonariegos el pistoletazo de salida de una de las fiestas con más arraigo en el Condado: Las cruces de mayo.
Este año, un centenar de mayordomos, de la Cruz de la Calle Misericordia han sido los encargados de preparar el primer día de festejos entorno a su cruz.
Tras la procesión del Santísimo, poco después de la misa de resurrección, el pueblo asiste a un desayuno organizado por la Cruz de Romero 2015. Migas, dulces, chocolate y café en unas calles inundadas de Romero y tradición.
12 años ha tenido que esperar la Cruz de la Calle Misericordia para volver a protagonizar estas fiestas grandes de Bonares. Este año la celebración está a cargo de una calle pequeña pero con historia y afán de superación.
El primer acto con el que los bonariegos cogen impulso para vivir la celebración de sus preciadas Cruces de Mayo.