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Conductores portugueses, residentes cerca de la frontera con Ayamonte, aprovechan estos días la rebaja de 20 céntimos de euro por litro en los carburantes, impuesta por decreto a las gasolineras españolas por el Gobierno central desde el pasado viernes.
Aunque se observa un ‘ir y venir’ constante de vehículos con matrícula portuguesa en las gasolineras de la ciudad fronteriza, no se trata de una situación nueva. Lo que sí es cierto es que se aprecia un mayor trasiego desde la entrada en vigor del decreto, que ha aumentado considerablemente la diferencia entre el precio de combustible a ambos lados de la frontera.
El precio del combustible en Portugal supera estas jornadas los dos euros el litro, aunque no solo a llenar sus depósitos se acercan a Ayamonte los usuarios, sino también a adquirir bombonas de butano “más baratas” que en su país.
Algunos españoles han señalado que les parece «bien» que los portugueses viajen a España para llenar los tanques de sus vehículos y han recordado momentos en los que la situación ha llevado a muchos españoles a repostar al país vecino.
