La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, ha comparecido, a petición propia, en el Parlamento de Andalucía para informar sobre la situación de sequía en la que se encuentra la comunidad autónoma. Y lo ha hecho, haciendo un repaso de todas las actuaciones en materia hídrica puestas en marcha y de la planificación establecida por la Consejería dentro de la hoja de ruta que, en su día, marcó el Pacto Andaluz por el Agua y que hoy se complementa con otras actuaciones y los dos decretos de sequía aprobados.
A este respecto, la titular del Agua ha explicado que Andalucía fue “previsora” al adelantarse a otras administraciones poniendo en marcha estos decretos de sequía, dotados con 141 millones de euros, y cuyas obras arrojan ya un 50 por ciento de ejecución y ya aportan hectómetros cúbicos de agua adicional a las zonas de la Axarquía o Campo de Gibraltar, entre otras. Por tanto, “estamos auxiliando a municipios y al sector agrícola”, ha dicho Crespo.
En su intervención, la consejera se ha mostrado convencida de la necesidad de “sacar la ideología de la política hídrica”. A su juicio, “el agua debe servir para ser encuentro de las administraciones y no un desencuentro porque es un elemento vital desde el punto de vista económico y social para Andalucía y España, puesto que sin agua es muy difícil que crezcamos o generemos empleo”.
De ahí que haya incidido en la necesidad de que todas las administraciones “tengan altura de miras y trabajen hombro con hombro, sin desdeñar ninguna fuente hídrica”, porque “la situación de la sequía es preocupante y puede serlo aún más si no se producen precipitaciones en los próximos meses”. Los embalses de Andalucía se encuentran al 24,9 por ciento de su capacidad, el nivel más bajo de la última década, con la Demarcación del Guadalquivir, competencia del Estado, al 21,4 por ciento, y las demarcaciones intracomunitarias, gestionadas por la Junta de Andalucía, al 33,66. Y por eso, se precisa “más desalación, aguas regeneradas, interconexiones y depuración”, ha apostillado Crespo.
En este sentido, Crespo ha incidido en “el esfuerzo inversor que está teniendo el ejecutivo andaluz en materia de depuración, el cual ha permitido incluso cumplir con Europa y bajar las sanciones de 12 millones de euros a 600.000 euros”. Estamos ante “un gobierno valiente que está invirtiendo en agua y agricultura porque esas aguas regeneradas son fuentes hídricas adicionales para nuestros regantes”.
Además, la consejera ha recordado que “el Gobierno andaluz aún no siendo su competencia ha auxiliado a la administración local declarando 17 obras de abastecimiento en alta como de interés de la comunidad autónoma” y ha detallado la importante inversión de 430 millones de euros que supone las mismas en Andalucía. A modo de ejemplo, la consejera ha querido resaltar “el alto grado de cumplimiento de la provincia de Sevilla, concretamente en la Sierra Sur, donde están al 80% en marcha”, así como la obra de Burguillos que se encuentra ya a un 15% o las conducciones de La Pipa San Cristóbal en Almería.
De hecho, según ha explicado la consejera, “el ejecutivo andaluz está modernizando los regadíos porque es crucial, ya que ayudan, en este tiempo de sequía, a ahorrar agua al actuar sobre fugas y pérdidas de las canalizaciones” y ha destacado “la colaboración público-privada con los regantes que nos ha permitido invertir en esta materia más de 200 millones de euros y ahorrar más de 12 hectómetros cúbicos de agua”.
Es por ello que la consejera de Agricultura y Agua ha querido proponer al Estado, desde la tribuna del Parlamento, que “la reprogramación de los fondos Next Generation sea una oportunidad para mitigar la sequía y sirvan para apostar por la modernización y la eficiencia del regadío”.
La consejera ha vuelto a insistir en la necesidad de que el Gobierno central acometa “con la máxima celeridad” las obras que son de su competencia y que tiene pendientes con Andalucía, así como el “cumplimiento íntegro de la Ley del Trasvase del Tinto-Odiel-Piedras al Guadalquivir” y las obras que ésta recoge, tales como las presas de Alcolea, Pedro del Arco, el canal de Trigueros, la ampliación de los bombeos de Bocachanza y, por supuesto, el túnel de San Silvestre del que espera “sea de verdad un desdoblamiento y cuente con la capacidad necesaria que piden los agentes económicos sociales de la provincia de Huelva”.
Por último, Carmen Crespo ha subrayado la importancia de la colaboración entre administraciones, “auxiliando especialmente a los municipios más pequeños” con ayudas como las puestas en marcha por la Consejería para aquéllos de menos de 20.000 habitantes con el fin de solventar los problemas de fugas de agua en sus redes de abastecimiento”.