Casi culmina la campaña de recogida de la aceituna de molino en la localidad de Chucena. Una campaña que proyectará una recolección de más de 600 mil kilos de producto de primor y que se transformará en el preciado oro líquido, que escala enteros como el segundo pilar económico del referido municipio.
Sin duda, una oportunidad, pese a la sequía del último tramo del presente curso, para remontar la crisis del sector, nacida de la pandemia de coronavirus.
Para el ayuntamiento de Chucena, “es transcendental respaldar al sector olivarero, con la intención de incrementar el consumo del aceite local, así como implementar las herramientas que logren revitalizar y rejuvenecer el campo propio”.
Una vez más, se confirma la apuesta de la administración local por el soporte a los productores de vino y aceite de oliva, dejando huella del aliento que supone el sector primario para la economía local, y que persigue empoderar las líneas de respaldo turístico y empleabilidad en el pueblo.