La Guardia Civil ha detenido al hermano gemelo del vecino de Laura Luelmo, al que todo el mundo apuntaba como sospechosos y quedó descartado al encontrarse en prisión, como presunto autor de su muerte.
El hombre ha sido detenido después de que los agentes haya registrado la casa de la joven y la del hermano de él, en la que este se encontraba viviendo y tras un movimiento sospechoso dentro de la investigación por la muerte de la profesora de 26 años.
El detenido, de 50 años, se encuentra en estos momentos en dependencias de la comandancia de la Guardia Civil de Huelva y ha sido arrestado en las proximidades de El Campillo, la localidad onubense donde residía la joven asesinada desde hace unas semanas.Los agentes se encontraban desplegados desde el mediodía en la calle Córdoba, donde vivía la joven, concretamente en el número 13. Fuentes de la investigación han confirmado que había previsto varios registros, aunque sin concretar en qué domicilios o bienes.
Fue excarcelado en octubre tras cumplir un condena de veinte años por asesinato y dos robos con fuerza y salió de la prisión de Huelva el pasado mes de octubre tras cumplir condena por el asesinato de una mujer de 81 años en 1995 en Cortegana y dos robos con fuerza.
Bernardo M.N. fue condenado a 18 años de prisión en 1997 por el asesinato de Cecilia Fernández Díaz, una anciana de 81 años, que iba a declarar contra él en un juicio de lesiones.
El 13 de diciembre de 1995 irrumpió en su casa del municipio onubense de Cortegana y le asestó varias puñaladas con un machete de grandes dimensiones en la región dorsal y el cuello, que le seccionaron la carótida y la yugular, causándole la muerte.
La defensa pidió la libre absolución del acusado aduciendo que se encontraba bajo los efectos del síndrome de abstinencia, por su adicción a la heroína y la cocaína, en el momento del suceso, circunstancia que fue tenida en cuenta como atenuante.
Tras cumplir condena, el acusado salió de la cárcel en 2015 pero pronto volvió a ella por dos robos con violencia y fue en octubre pasado, con 50 años recién cumplidos, cuando Bernardo M.N. fue de nuevo excarcelado de la prisión de Huelva.
Cerca de la casa donde residía Laura Luelmo vive un vecino, L.M., descartado como sospechoso porque el 12 de diciembre, día de la desaparición de Laura Luelmo, se encontraba interno en la prisión de Ocaña (Toledo). La cárcel le concedió un permiso este lunes, el mismo día que apareció el cuerpo con señales de violencia.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis, ha asegurado este martes que el detenido tras un movimiento sospechoso y dentro de la investigación por el crimen de la profesora de 26 años, lo ha sido ante el riesgo de fuga y se encontraba “vigilado y observado” por la Guardia Civil.
El detenido quedará bajo custodia de la Guardia Civil, el cuerpo que está al frente de la investigación, ya que aún no hay pruebas definitivas de su implicación con el crimen de Laura Luelmo.