La junta directiva de Ciudadanos en Gibraleón ha decidido dimitir en bloque tras entregar un comunicado este lunes donde muestra su rechazo a la actitud de la dirección provincial de la formación, y en especial, de la Secretaría de Organización.
De igual modo, los integrantes de la citada junta se dan de baja como militantes de la formación que lidera Albert Rivera.
Dicha junta, coordinada por Juan de Dios, califica de “difícil” la situación adoptada y anuncia que “continuamos con nuestro proyecto Gibraleón y su bienestar social íntegro, desde la libertad y el respeto a todos los votantes que los partidos políticos no han sabido demostrar, y con más fuerza e ilusiones que nunca, porque estamos convencidos de que el único camino que debe seguirse en política es el de la honestidad, el servicio y la entrega al trabajo que conlleva lograr el bienestar común”.
Este es el comunicado que Cs de Gibraleón ha entregado explicando los motivos de su marcha de dicha formación política:
“Entramos a formar parte del proyecto Cs porque queríamos ser parte de la solución y no del problema y, sin embargo, en las últimas ocasiones que hemos tenido de demostrarlo, el partido no ha estado a la altura y se ha convertido en parte principal del tan nombrado problema, el 10N.
Su irresponsabilidad, junto con la de los restantes partidos políticos, nos ha abocado a la celebración de las cuartas elecciones generales en menos de cuatro años, con el perjuicio económico que ello supone para los ciudadanos y el tremendo descrédito a la política ganado a pulso por nuestros representantes nacionales, que han sido incapaces de cumplir con su función y llegar a los acuerdos necesarios para que España pudiera tener un gobierno estable.
Los españoles no nos merecemos unos partidos políticos que antepongan sus intereses a los de los ciudadanos, ni tenemos por qué manifestar nuestra voluntad una y otra vez en las urnas solo porque a nuestros diputados, o a unos partidos o a otros, no les guste el resultado, que en poco o nada puede variar si nos obligan a votar a los mismos que ya votamos y fueron incapaces de cumplir con su trabajo.
Y no, nosotros no estamos dispuestos a ser parte de ese engaño.
No hemos entendido a nuestro partido ni sabemos ya hacia dónde va, porque nada se nos consulta ni se nos explica. No se nos ha tenido en cuenta y se ha virado ahora a un lado, ahora al otro, en función de intereses que nada tienen que ver con los ciudadanos ni con la verdadera política, que no es otra cosa que servir a estos últimos.
Y tampoco nos valen las ocurrencias de última hora para salvar los muebles y redirigir las flechas de los sondeos, la responsabilidad debe ejercerse cada día, y no bastan las ofertas vacías hechas sobre la bocina para borrar el daño que se ha causado durante meses.
Ciudadanos ha cambiado, tanto que ya no lo reconocemos, pero nosotros seguimos siendo los mismos que cuando empezamos, y por todo ello, hemos llegado a la conclusión de que, en estas circunstancias, nos resulta imposible continuar con el proyecto que ofrecimos a los olontenses desde la más profunda honestidad y responsabilidad, sin abandonar nuestra militancia en Ciudadanos, y por eso hoy hemos comunicado al partido la dimisión en bloque de la Junta Directiva de la Agrupación de Cs en Gibraleón así como la baja irrevocable de nuestra afiliación a Cs.
Porque a ellos, nuestros vecinos, a nuestro pueblo es a los que debemos fidelidad y no a una formación política que ya no representa nuestros valores.
Tras el trabajo y la ilusión puesta en las distintas campañas electorales, dónde la agrupación se dejó la piel en hacerlo todo de forma impecable, hemos sentido que tras no darse los resultados esperados se ha relegado a quienes han trabajado en primera línea, pareciendo un castigo. Cuando en realidad se esperaba de la cúpula un apoyo mayor, para impulsar y apoyar el trabajo realizado para así poder mejorarlo, es por ello que consideramos que nos ha faltado una reunión de evaluación donde analizar los resultados, donde proponer actuaciones que animaran a seguir.
Nos ha faltado apoyo por parte de aquellos a quienes hemos apoyado. No se ha tenido en cuenta el mérito y el trabajo. Dando prioridad al amiguismo y al interés personal que a la valía del trabajo realizado por los miembros de la agrupación.
Esta no ha sido una decisión fácil, pero creemos que es la correcta, porque, a estas alturas, continuar en un partido que en nada se parece a aquel que defendimos, supone engañar a los que nos votaron y depositaron su confianza en nosotros, y, precisamente para no traicionar esa confianza, hoy abandonamos unas siglas con las que ya no nos identificamos, pero continuamos con nuestro proyecto Gibraleón y su bienestar social íntegro, desde la libertad y el respeto a todos los votantes que los partidos políticos no han sabido demostrar, y con más fuerza e ilusiones que nunca, porque estamos convencidos de que el único camino que debe seguirse en política es el de la honestidad, el servicio y la entrega al trabajo que conlleva lograr el bienestar común”.