Emilio de Llera presidió, en la tarde de ayer, una reunión extraordinaria de coordinación regional del Plan Romero 2016 para analizar y hacer frente a los problemas planteados por las inclemencias meteorológicas.
Además del Consejero de Justicia e Interior, el salón de plenos de la casa consistorial almonteña contó con la presencia de los delegados del Gobierno andaluz de Sevilla y Huelva, y el subdelegado del Gobierno central en la provincia de Huelva, Enrique Juan Pérez Viguera, junto a los responsables de Protección Civil, el Presidente de la Hermandad Matriz, Juan Ignacio Reales, y la Alcaldesa almonteña, Rocío Espinosa de la Torre.
El consejero destacó el objetivo que tienen todas y cada una de las medidas impuestas, que no es otro que garantizar la seguridad de los romeros ante las condiciones adversas que se han presentado a causa de las fuertes lluvias.
Los Caminos de Sevilla se verán afectados con el corte de la Cañada Real de los Isleños y el desvío de las hermandades que debían transitar por ella, por la carretera de La Puebla a Aznalcázar.
Además, antes de llegar al Cordel de los Playeros, se ha limitado un tramo, por lo que las tracciones mecánicas de las hermandades tienen que salir por el Pozo de las Culebras a la A-474, cogiendo la Colada de Lopa y, una vez que lleguen a Aznalcázar, alcanzar la carretera Puebla-Aznalcázar hasta llegar a la ESPA para entroncar de nuevo con el cordel siguiendo el camino habitual.
Actualmente están intransitables la Raya Chica y la Raya Real hasta el Ajolí, así como ciertos tramos por los que discurren las hermandades de Sevilla y Huelva, que siguen el itinerario del Camino de Hinojos. Para solucionar el problema de las dos rayas, las filiales deberán tomar la carretera de la Fresa hasta el Rocío, mientras que las del Camino de Hinojos harán lo propio por la carretera del Arrayán.
En el caso de la provincia de Huelva, por Cumbre Hermosa discurrirán las filiales de Valencia, Estepona y Santa Fe. En estos momentos, el estado de los caminos de Moguer y de Bonares es transitable.
Los caminos de Cádiz han sido los menos castigados por la lluvia y no sufrirán cambio hasta la llegada al Palacio de Doñana. Aun así, se está evaluando que los vehículos pesados y ligeros se desvíen por la conocida como Carretera de los Linces. Según lo previsto, las hermandades van a llegar hasta el Palacio de Doñana para pernoctar allí, como es tradicional y, a partir de ahí, se va a evaluar si se desvían los vehículos.