El Ayuntamiento de La Palma ha inaugurado en las instalaciones de la Cámara Agraria un nuevo proyecto de la concejalía de Asuntos Sociales, se trata de un ropero social, que tras meses de trabajo ve la luz gracias a la colaboración de los voluntarios de Cáritas Parroquial y la Asociación de Viudas mujeres con Futuro. Representantes de los dos colectivos que gestionarán el ropero, asistieron a esta inauguración, junto al alcalde, Manuel García Félix, la nueva concejala de Asuntos Sociales, Antonia García y Rocío Teba, iniciadora del proyecto, así como el párroco de nuestra localidad, Francisco Martín Sirgo, que bendijo las instalaciones.
El Ayuntamiento ha cedido las instalaciones para la gestión de este ropero social, que ha recibido una subvención por parte de la entidad financiera La Caixa para su puesta en marcha. La concejala agradeció además la buena predisposición y facilidades ofrecidas por la Cooperativa Cerealista, con la que comparte sede, a la empresa auto recambios Corumbel por donar las estanterías, y muy especialmente a los colectivos que han hecho posible que esta idea sea hoy día una realidad.
El ropero social abrirá dos días a la semana, lunes y miércoles, en horario de diez y media de la mañana a una y media de la tarde en estos meses de verano. Como paso previo será imprescindible acudir a Servicios Sociales para registrarse, donde se facilitarán unas tarjetas de un solo uso para retirar la ropa o los artículos que necesiten.
Las instalaciones constan de estancias para el lavado y planchado, así como almacén y exposición, tanto de ropa como calzado, juguetes, y artículos para bebés: cochecitos, cunas o parques, que suele ser lo más demandado por las familias que se encuentran en caso de necesidad o en exclusión social.
La asociación de viudas mostró desde el principio su entusiasmo por llevar a cabo este proyecto, que debido a su envergadura ha requerido la colaboración de más voluntarios, uniéndose con Cáritas Parroquial.
El alcalde, Manuel García Félix, resaltó la sensibilidad, trabajo y buen hacer de estos colectivos, para crear un gran fondo de armario que tiene un gran destino, una entrega solidaria y labor humanitaria que es un propósito encomiable en nuestra sociedad.
En esta misma sede que acoge el ropero social también se puede entregar ropa. La concejala de asuntos sociales animó a la población a participar y hacer más grande este proyecto.
Un ropero social en el que se tiene depositada gran ilusión por ayudar a los demás esperando que tenga buena acogida y éxito.