El Ayuntamiento de Isla Cristina ha lamentado el trato que, por parte de la Junta de Andalucía, se le ha dado a los resultados del cribado poblacional de Covid-19 realizado en el municipio. El alcalde, Jenaro Orta, ha salido al paso de la información facilitada señalando que la organización y la realización “no fue la correcta” y distó mucho “de la forma en la que se ha llevado a cabo en otros pueblos”.
A este respecto, el primer edil ha señalado que “de las 788 personas citadas, sólo realizaron 283 test, que arrojaron un positivo, y que no se pudieron realizar más pruebas puesto que sólo acudieron un enfermero, un técnico de laboratorio y dos administrativas que trabajaron a destajo” mientras que en otros pueblos, se ha contado con “un coordinador, dos enfermeros y dos técnicos, como mínimo”.
Orta ha añadido que, los profesionales, “tuvieron que dejar de hacer pruebas a las cuatro de la tarde, aunque estuvieron trabajando in situ hasta las ocho porque la jornada fue caótica, en todos los sentidos, y muy ralentizadas, con una media de espera de dos horas de retraso por persona”.