El 1 de mayo se hizo fiesta en el conocido Barrio Obrero de Almonte. Un tradicional festejo, el del Día del Trabajador, que los vecinos de la Asociación Picasso han querido recuperar tras un año de ausencia.
La asociación, formada principalmente por mujeres, tomaron como punto de encuentro el simbólico parque Clara Campoamor. Una barra con precios populares, concurso de tortillas y dulces gratis para merendar. También, numerosas actividades para los pequeños entre las que destacaba la pista de patinaje.
Así, gracias a la colaboración del Ayuntamiento, como a la participación vecinal, los almonteños de este barrio pudieron hacer honor a su idiosincrasia en el que señalan como “su día”.