Por Las borrascas e intensas precipitaciones que han protagonizado este mes de enero, no han traído consigo solo malas noticias.
En el Espacio Natural de Doñana, las lluvias “han regalado salud y vida”.
Concretamente, el volumen de precipitaciones registradas incluso ha superado los 300 litros por metro cuadrado. Unas cifras que no se alcanzaban desde enero de 2015, hace una década.
La presencia de estas lluvias y la acumulación de agua está provocando que la marisma se inunde, una situación favorable precisamente porque se ha producido en una fecha clave para la migración de aves que vendrán procedentes del Norte de Europa.
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