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Los sones flamencos fueron los grandes protagonistas de la noche del sábado en Moguer con dos espectáculos que se desarrollaron con brillantez en la localidad juanramoniana.
Por un lado los aficionados al cante grande disfrutaron de una nueva sesión del espacio Luna Flamenca, un proyecto que desde hace unos años ocupa un lugar destacado en el Festival Luna de Verano, organizado por la Fundación Municipal de Cultura para llenar de contenido las veladas estivales de la patria chica del Nobel moguereño y de Mazagón.
El escenario elegido para disfrutar de una velada que reivindica y proyecta nuestras raíces fue la Plaza de la Coronación, donde multitud de moguereños se dieron cita para disfrutar de un espectáculo ‘jondo’ lleno de compás y sentimientos que fue bautizado como ‘El vínculo de la sangre’.
Los cantaores José Garrido ‘Gali’ y Antonia Garrido Ruiz fueron los protagonistas de una velada, en la que también participó el moguereño Antonio ‘Caballero hijo’, continuador de la saga flamenca familiar, que acompañó a los artistas con su guitarra.
Este ciclo musical, con el que la Peña de Cante Jondo de Moguer y la Fundación Municipal de Cultura apuestan de forma decidida por mantener vivo un arte que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad, será clausurado el próximo 20 de agosto a las 22.30 horas en la Plaza del Marques.
El otro gran espectáculo que llenó de embrujo la noche del sábado fue el II Festival ‘Moguer canta a Montemayor’, una iniciativa benéfica organizada por la Hermandad de Montemayor con la colaboración del Ayuntamiento de la localidad, que cerró su segunda edición con un gran éxito de participación.
Hasta las plantas de la Patrona se desplazaron centenares de vecinos para disfrutar del talento de María Rodríguez Ortiz, Son de Lunares, Susana Gómez, Nieves Garrido y Manuel María Domínguez al cante, junto a la guitarra de Álvaro Mora y el grupo de la Academia de ‘La Mejorana’ al baile.
Este segundo festival tuvo como principal objetivo la recaudación de fondos para el proyecto benéfico que está llevando a cabo la Matriz de Montemayor en la república africana de Benin, donde está construyendo una escuela que será bautizada con el nombre de la Patrona de la ciudad.
