La Calle Azul de Matalascañas se convirtió ayer en una pista de patinaje de velocidad improvisada. Fue gracias al Club Deportivo de Patines Alistogi, de Almonte, que, por segundo año consecutivo, organizó el Día del Patín. Una vez más, la actividad fue todo un éxito.
Fueron muchos aficionados a este deporte los que se acercaron ayer a esta zona de Matalascañas para participar en esta actividad. Además, el club almonteño contó también con la colaboración de ‘Patinaventura’, que vinieron dispuestos a enseñar todo lo que saben a los allí presentes. Además, también trajeron muchos y regalos y ganas de transmitir esta pasión por la velocidad en línea.
Una vez finalizados los juegos, saltos y exhibiciones, los allí presentes se adentraron en una ruta nocturna por el núcleo costero.