El Estadio Municipal bollullero “Las Viñas” fue testigo de la primera edición de la competición de resistencia, en la disciplina del motocross.
El club local “El Pinchazo” busca incentivar la visión del deporte a las dos ruedas, instando a los padres a que apuesten por la disciplina del motor.
Ya que, según expresan los propios directivos del motoclub, “niños y niñas llevan protecciones obligatoriamente y, pese a estar en contacto con la velocidad, el circuito, el personal de seguridad y, la propia planificación de la prueba, persiguen minimizar el riesgo de cualquier complicación”.
En concreto, a competición contó con dos grandes categorías, subdivididas a su vez, en dos ramas. La categoría adulta contaba con la prueba en automático y la prueba de marcha, mientras que los más pequeños se dividieron en 50 y 65 centímetros cúbicos.
En última instancia, y como forma de financiar la gestión y desarrollo del club local, se dispuso una tasca con precios populares, y una entrada al recinto con un coste simbólico de tres euros.