La primera plantilla del Recreativo de Huelva ha regresado esta mañana a los entrenamientos en el Nuevo Colombino y lo ha hecho con buenas y malas noticias en cuanto a su enfermería. Iván Robles y Sedeño han entrenado con el resto del grupo y por lo tanto todo indica que podrán estar disponibles ante el Melilla, aunque el sevillano no ha completado toda la sesión al tener todavía molestias del último partido de Lorca. Además, Ubay Luzardo, que se perderá el partido por sanción, también viene aquejado de molestias y se ha decidido desde el cuerpo técnico y médico que pare para llegar bien a las tres últimas jornadas ligueras.
Peores noticias hay con el mediocentro defensivo Jesús Vázquez, que continúa con las molestias en el semitendinoso de la pierna izquierda y hoy ha trabajado al margen del grupo, intentando forzar mañana para llegar para esta importante cita, pero no parece que vaya a llegar en las mejores condiciones físicas a este encuentro. Dependiendo de su evolución, se decidirá si entra o no en convocatoria, aunque todo indica que no llegará a tiempo.
Además, la enfermería se ha vuelto a cargar con un inquilino asíduo durante toda la temporada, ya que Mario Marín, que tenía previsto acabar la temporada jugando algunos minutos, ha vuelto a recaer de su grave rotura de fibras en el cuádriceps y dice ya adiós a una temporada nefasta para él, donde sólo ha jugado los tres partidos iniciales en la temporada.